Lá lluvia

       Existen varias maneras de contemplar la lluvia
       la manera mas bella es la del poeta
      El poeta no observa ahi las nubes cargadas
       ni las inundaciones embarradas.
      Mas ve millares de flores que en breve iran a florecer
       coloreando los campos, distribuyendo su perfume
      Asi son las lluvias que caen sobre nosotros
      y que parecen más allá de nuestra capacidad para apoyar
      la lluvia de decepción, de la falsedad,
      la destrucción de nuestros planes,
      de las grandes decepciones, haciendo al corazon temer y
      estremecer de tanto sufrimiento.
      Las nubes oscuras que pasan sobre nosotros
      traen consigo lluvias de bendiciones,
      cuando cesan traeran para nosotros
      las flores del enriquecimiento del espíritu
       experimentaremos fragancias y bellezas
      que nunca habíamos conocido
      cosas que no imaginabamos posíble
      antes que estas aguas cayeran sobre nosotros.
      Es cierto que siempre veremos las nubes y las aguas que de ellas caen,
      mas precisamos observar las flores, mirar su florecer y
      las fragâncias que vendran con ellas.
      Esta lluvia va a ablandar nuestros corazones,
      nos va a preparar para el resurgir del sol,
        nos va a recordar que precisamos tener entre nosotros sentimientos ,
      la serenidad para ver el caer de la lluvia y la consecuente
      compasion por otros que son azotados por las águas por falta de entendimiento.
      No tonemos las lecciones de la afliccion,
      mas si de la dulzura venidera, de compasion, paciencia,
      serenidade, amor y de la esperanza divina;
      y,  mil otras flores y frutos que nacen de nuestra fe en Dios.
      Se como el poeta y durante la lluvia, observa las flores.
Candy Saad